Japón esperaba y Kiko Martínez apareció por Japón. El resultado final no fue el que Kiko esperaba y deseaba, ya lo adelanto. El boxeo es, como bien dice el título del libro del gran Jero García "El boxeo es vida, vive duro", Kiko Martínez hace homenaje a ese título en el más amplio sentido del mismo.
Muchas noches de gloria nos ha dado este señor, muchas. Y éste Sábado a pesar del resultado el hecho de sentarte enfrente de la televisión ante una gran velada y que uno de los protagonistas represente tu país, siendo España un lugar donde el boxeo es minoritario comparándolo con otros deportes, pues emociona bastante y ya es un triunfo el sólo hecho de estar. Que fuera una eliminatoria mundial, a mi modo de ver es casi anecdótico, aunque realmente tenga peso pero Kiko lo ha sido todo.
El rival, Reiya Abe, más joven que Kiko, compitiendo en casa y de más altura, nunca había hecho una pelea tan completa como la de hoy. Lo repasé bastante, lo poco que había de Abe por Internet. Jamás lo vi tan sólido como hoy. Podemos pensar que el peso pluma le puede venir grande al español, no sé, no estoy en su cuerpo para emitir una opinión formada. Quizás la sensación que tengo es que el transcurso de esta pelea era la que esperaba que ocurriera ante Kid Galahad y que la potencia de Kiko evitó. Hoy sí ocurrió.
El boxeo técnico tiene muchas acepciones. Puedes ser alguien técnico peleando hacia adelante al igual que boxeando a la expectativa y usando más las piernas. En esta pelea la técnica del boxeador rápido, hábil que se mueve de piernas y contragolpea ha sabido destacar ante la técnica del boxeador que va hacia adelante. A lo que muchos llaman "Boxeador técnico" lo que realmente quieren decir es "Boxeador preciosista", alguien que hace del boxeo arte, algo bello aunque como decía antes, el arte, lo bello o lo técnico es muy subjetivo en lo que a gustos se refiere. Entrando al meollo creo que Kiko ha sido desbordado casi toda la pelea y no ha sabido imponer en ningún momento su experiencia y pegada. Abe ha lucido bien, muy bien. Ha demostrado saber sufrir y saber capear el temporal. Cada asalto que pasaba, Abe lanzaba combinaciones más largas y cogía confianza. Finalmente la decisión de los jueces sería el reflejo de lo que todos sentimos al ver el pleito.
Poco que añadir en referencia a la gran carrera de Kiko Martínez, el que no la conozca que la busque, informaros, explorar si os gusta este gran deporte. No dejéis que las nuevas redes sean vuestro único medio de disfrute y conocimiento real viendo 30 segundos de una pelea o de cualquier ámbito en la vida.
Máximo respeto también a Reiya Abe que nos ha hecho disfrutar con su boxeo preciosista y guerrero a la vez.
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